En Argentina, según el último Censo Nacional, viven casi dos millones de mujeres con discapacidad y un tercio de ellas se encuentra en edad reproductiva. Diversos estudios han demostrado que es frecuente que las mujeres y niñas con discapacidad (MND) encuentren serios obstáculos para acceder a información y servicios de salud sexual y reproductiva respetuosos de sus derechos, vulnerando sus derechos sexuales y reproductivos.
¿Cuáles son las barreras de acceso más frecuentes? Por un lado, experimentan diversas formas de violencia contra su libertad reproductiva en ámbitos institucionales, por ejemplo, barreras legales y físicas que les impiden tomar decisiones autónomas sobre su salud sexual y reproductiva y sobre su cuerpo. Por otro lado, y en virtud de estereotipos sobre su sexualidad y prejuicios sobre su incapacidad para criar a sus hijxs, a las MND se les restringe el poder de elegir libremente el método o práctica anticonceptiva que desean utilizar y se las somete a prácticas forzosas, como la prescripción de métodos anticonceptivos de larga duración y/o a prácticas de esterilización quirúrgica sin su consentimiento (ni formal ni informalmente informado).
Además, en nuestro país aún existen normas jurídicas que vulneran los derechos de las MND, tales como el artículo 3 de la Ley 26.130 que faculta a los/as jueces a autorizar la esterilización de MND con restricciones a su capacidad jurídica, una intervención judicial que está expresamente prohibida en el caso de las mujeres sin discapacidad. Esta distinción constituye una forma de discriminación por motivos de discapacidad que vulnera el derecho de las MND a mantener su fertilidad en igualdad de condiciones con el resto de las personas.
Empoderamiento y capacitación para la acción: el proyecto DeSeAr con inclusión
Desde el 2018, y junto con la Red por los Derechos de las Personas con Discapacidad, llevamos adelante el Proyecto DeSeAr (Derechos Sexuales en Argentina) con inclusión, una iniciativa que busca promover el acceso a los derechos sexuales y reproductivos y eliminar la violencia institucional que experimentan en el acceso a los servicios de salud las niñas y mujeres con discapacidad.
En este sentido, los hospitales y centros de salud se convierten en espacios claves que deben ser abordados para alcanzar estos objetivos. Por eso, uno de los focos de acción del proyecto es la capacitación y entrenamiento de equipos de salud para lograr que se transformen en líderes y puntos focales a la hora de brindar información, bienes y servicios de salud sexual y reproductiva con perspectiva de género y discapacidad. Trabajamos con grupos interdisciplinarios de salud que se desempeñan en distintos niveles de atención, con el fin de generar un cambio sostenible, en actitudes, conocimientos y prácticas en materia de salud sexual y reproductiva de MND y en oferta de servicios respetuosos de los derechos de las personas con discapacidad en general, y de MND en particular.
Actualmente, se encuentran participando del proyecto DeSeAr aproximadamente 80 profesionales de la salud que se desempeñan en el primer y tercer nivel de atención en CABA, y se espera incluir a grupos interdisciplinarios de personal de salud del Gran Buenos Aires, en los primeros meses de 2020.