Las y los profesionales de la salud por el derecho a decidir se reunieron en Buenos Aires el último fin de semana.
Esta red, integrada en la actualidad por más de 800 profesionales de todo el país, surgió en 2014 a partir de la necesidad de organización de quienes acompañan a las personas con capacidad de gestar en la decisión de si continuar o no con un embarazo. El encuentro, que contó con el apoyo de FUSA AC, se desarrolló los días sábado 19 y domingo 20 en la Casa de la Militancia – Ex-ESMA.
El temario del encuentro incluyó una discusión sobre la coyuntura en tiempos del debate por la legalización de la interrupción voluntaria de embarazo; el rol de la red de profesionales de la salud en esta coyuntura; la organización interna de la red y diferentes mesas de capacitación.
Sobre la red de profesionales
“Cansadxs de la soledad del consultorio decidimos desclosetar nuestras prácticas y decir que acompañamos interrupciones legales del embarazo a lo largo de todo el país. En estos años, denunciamos a los profesionales de la salud que en Tucumán impartieron torturas y denunciaron a “Belén”; llevamos a cabo un Amicus Curiae cuando nuestra compañera de la Red fue judicializada por garantizar derechos en El Maitén (Chubut); creamos en conjunto con estudiantes, activistas de la Campaña y Socorristas cátedras de Aborto como problema de salud en distintas universidades del país, entre otras acciones que posicionaron a la Red como actor político y social clave”, explicaron los organizadores.
Y agregaron: “Actualmente participamos de forma activa del debate en el Congreso de la Nación sobre la legalización de la Interrupción Voluntaria del Embarazo en donde muchxs de esta Red estuvieron y estarán presentes como expositorxs. Una nueva plenaria nacional nos encuentra con una imperativa necesidad de organizarnos de cara a la coyuntura. Queremos consolidarnos como actor fortalecido que lucha activamente por la legalización del aborto en cada rincón del país.
Además seguimos exigiendo producción pública de misoprostol, aprobación de mifepristona, acceso a AMEU en todos los niveles de atención y cumplimiento del derecho a las interupciones legales de los embarazos”.