Zika: el acceso a la información es clave para las mujeres embarazadas
Se realizó ayer la jornada “El Zika en la agenda de la salud sexual y reproductiva”, organizada por Fusa Asociación Civil. Con la presencia de autoridades sanitarias y especialistas en el tema se analizaron las consecuencias de la epidemia y las estrategias para asegurar el control de la transmisión.
“Cuando hablamos de zika tenemos que entender que el centro no es el mosquito o la fumigación, el centro es la mujer y por eso deben defenderse los derechos sexuales y reproductivos asegurando el acceso a la información de las mujeres embarazadas”, aseguró ayer el Dr. Rodolfo Gómez Ponce de León, asesor de salud reproductiva de la Organización Mundial de la Salud, en el marco de la jornada “El Zika en la agenda de la salud sexual y reproductiva” organizada por FUSA Asociación Civil.
Durante el encuentro -que contó con el apoyo de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), y que reunió a especialistas en el tema, autoridades del Ministerio de Salud de la Nación, de organismos internacionales, equipos de salud- se señaló que el avance del zika en la región implica una necesidad de estar preparados y adelantarse a la epidemia en Argentina profundizando en políticas de prevención.
Al respecto el Dr. Rodolfo Gómez Ponce de León, señaló que “la microcefalia solo es la punta del iceberg”, que el incremento en el número de niños nacidos con microcefalia condujo a la OMS a declarar en febrero de 2016 una alerta ante la enfermedad del zika y que la expansión de casos desde el noroeste brasilero hacia el sur de ese país debería ser una alerta “para que esta situación no llegue al noroeste argentino”, ya que en el país todavía no se declaró la epidemia.
Además indicó que las mujeres embarazadas “tienen que tener un control prenatal muy precoz” dado que “el diagnóstico de microcefalia es post natal”; y que los equipos médicos deben profundizar las preguntas de rutina sobre la presencia de síntomas del zika como conjuntivitis, prurito en la piel. Aunque advirtió también la dificultad existente ante casos asintomáticos.
El Dr. Ponce de León dijo también que la OMS ha señalado diferentes posiciones ante el caso de detección de microcefalia durante el embarazo: “informar a la mujer y apoyarla si decide continuar con el embarazo, sino acompañar en el marco de la máxima expresión de la ley ante una interrupción, e informarle cuáles son las conductas que pueden llevarla a una interrupción del embarazo en forma insegura con graves consecuencias”.
Sobre el virus y la transmisión
En la jornada, realizada desde las 8,30 en el auditorio de la Fundación Navarro Viola de la Ciudad de Buenos Aires, se explicó que el virus puede afectar a quienes han sido picados por el mosquito como también a aquellos que tuvieron relaciones sexuales con personas infectadas y a los niños de mujeres que han contraído el virus durante el embarazo.
Entre las recomendaciones brindadas en la jornada se señaló evitar los criaderos, evadir la picadura con el uso de repelentes autorizados, usar cortinas embebidas con insecticidas, fumigar y usar preservativos durante el embarazo.
La epidemia, una oportunidad
Por su parte, el Dr. René Castro, miembro del Comité de Derechos Sexuales y Reproductivos de la Federación Latinoamericana de Sociedades de Obstetricia y Ginecología (FLASOG) planteó que “esta epidemia es una oportunidad para mejorar los servicios de salud y para que los equipos de salud hagan este aporte”. En esta línea hizo hincapié en el rol que tienen dichos prestadores en favorecer la autonomía y el proceso de toma de decisiones profundizando en el “compromiso de cuidar los derechos de las mujeres”. Asimismo, señaló que “hombres y mujeres necesitan tomar conciencia de la potencial transmisión del virus zika por vía sexual”.
El Dr. José Moya, consultor en vigilancia, prevención y control de enfermedades de la Organización Mundial de la Salud (OMS) indicó que el reto está en la vigilancia epidemiológica y en los servicios de salud y que “todos tenemos que repensar, compartir y difundir siguiendo las recomendaciones de las
autoridades de salud de cada país.”
“En Argentina estamos varios pasos adelantes, todavía no llegó, y debemos tratar de articular la áreas de epidemiología, atención primaria de la salud, salud sexual y reproductiva, adolescencia” señaló Ariel Karolinski, consultor en Salud Familiar, Género y Curso de Vida de la Organización Mundial de la Salud (OMS). “Estas enfermedades exponen el nivel de desigualdad social que viven nuestras poblaciones. Por eso es doble la responsabilidad que tenemos para definir políticas públicas que prevengan, controlen y minimicen los daños de estas enfermedades”, agregó.
Por su parte, Sandra Vázquez, ginecóloga y directora ejecutiva de FUSA Asociación Civil, señaló que “el desafío que tenemos en la Argentina -visto que aún la epidemia no avanzó- es trabajar juntos en medidas de prevención aprovechando la posibilidad de anticipación que tenemos”.
Entre los especialistas y autoridades nacionales presentes en la Jornada estuvieron Dora Vilar de Sarachaga, subsecretaria de Atención Primaria de la Salud del Ministerio de Salud de la Nación; Silvia Oizerovich, coordinadora del Programa Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable del Ministerio de Salud de la Nación; Sandra Vázquez, ginecóloga y directora Ejecutiva de FUSA Asociación Civil; y Raúl Forlenza, de la Dirección Nacional de Enfermedades y Riesgos del Ministerio de Salud de la Nación.
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